Ciertos peinados basan su atractivo en el grado de desafío a la ley de gravedad que logran alcanzar. Por tal razón, necesitan de una ayuda extra para permanecer en su lugar, un rol que la laca de pelo cumple a la perfección gracias a que es un producto rico en polímeros, los cuales, además de dar brillo al cabello, lo modelan y lo fijan. No obstante, a pesar de sus inigualables dotes para conservar un peinado o un look capilar, la reputación de la laca se ha venido abajo debido a los supuestos daños que le produce al cabello. ¿Qué hay de cierto en todo lo que se dice de la laca para el cabello? Te lo contamos a continuación.
¿Es dañina la laca para el pelo?
Debido a la gran diferencia en la composición química entre las diferentes lacas para el cabello disponibles en el mercado, la respuesta es que depende del producto en cuestión y de la frecuencia con la que la utilicemos.
¿Cuáles son los daños que produce la laca para el cabello?
Resulta curioso el hecho de que los daños que generan en el cabello las lacas, son producto de los compuestos químicos necesarios para que la laca cumpla con su función. Para que el cabello se quede estático y el peinado no se desmorone, es necesario resecar la fibra capilar.
La resequedad del cabello es el factor detonante de la pérdida del brillo y del quiebre de la hebra del pelo. Por lo tanto, el uso frecuente y prolongado de lacas capilares conduce a la opacidad y al desarrollo de una cabellera de aspecto y tacto pajizo, y de consistencia quebradiza.
¿Qué le sucede al cabello cuando estos factores se acumulan? Nada menos que la tan temida caída dramática del pelo, fenómeno que deriva en la alopecia.
¿Cuáles son los componentes de la laca que dañan el cabello?
El grado de toxicidad y de daño que puede presentar la laca para el pelo, se encuentra determinado por sus componentes químicos, los cuales son:
- Carboximetilcelulosa
- Alcohol desnaturalizado
- Hidrofluorocarbono
- Alcohol polivinílico
- Propilenglicol
- Polivinil pirrolidona
Estos componentes, además de ser perjudiciales para la salud de los sistemas de nuestro cuerpo, tal como el aparato digestivo, producen sequedad en el cuero cabelludo y el debilitamiento de la hebra capilar y de su raíz. A consecuencia de estos daños, el folículo piloso se afloja y el cabello se cae. Esto puede generar diferentes tipos de alopecia, o calvicie, lo cual podría hacer necesario un injerto capilar para revertirla.
No obstante, es posible prevenir la pérdida de cabello como consecuencia del uso de la laca para el pelo si es que se toman en cuenta las siguientes medidas:
- Limitar el uso de la laca solo para ocasiones puntuales
- Evitar aplicarnos laca que contenga ingredientes nocivos
Uno de los principales agravantes de los efectos de la laca, es la frecuencia de aplicación. Aquellas personas que la usan a diario elevan exponencialmente las posibilidades de ser alcanzadas por sus efectos nocivos. En cambio, si tan solo la usamos para mantener nuestro peinado o look de manera ocasional, entonces no tendremos nada de qué preocuparnos.
Por otra parte, nos encontramos con el tema de los componentes dañinos que están presentes en las lacas para el cabello. Si bien actualmente no es posible elaborarlas sin la presencia de ninguno de dichos químicos, también es una realidad que los fabricantes han encontrado formas de sustituir a algunos de estos compuestos. De modo que leer la fórmula de la composición o buscar aquellos productos que se promocionen como desprovistos de alcohol, por ejemplo, reducirá el daño que recibe nuestro cuero cabelludo.
¿Puedo confiar plenamente en las lacas con menos concentración de químicos nocivos?
En este punto vale la pena detenernos para explicar algo que no deberías pasar por alto si tu propósito es cuidad la salud de tu cabello. En teoría, cuando una laca contiene una menor concentración o ausencia de ciertos químicos que dañan la estructura capilar y el cuero cabelludo, el perjuicio que recibe nuestro cabello es menor.
Sin embargo, esta es una verdad a medias.
Para que la laca logre mantener el peinado en su lugar, tiene que formar una película viscosa a lo largo del cabello. Por lo tanto, cuando la presencia de los químicos nocivos es menor, necesitarás aplicarte más producto para lograr tu propósito. En consecuencia, tu cabello recibirá la misma cantidad de químicos.
Una de las posibles soluciones a esta trampa es usar la misma cantidad de producto que tu cabello requería con la laca que siempre has usado. Es decir, obtendrás un resultado menos potente, pero expondrás a tu pelo a una menor cantidad de polímeros y alcoholes. Las demás alternativas están abordadas a continuación.
Cuándo y cómo usar la laca para el cabello
La mejor forma de recurrir a la laca y evitar daños irreversibles en el cabello, es elegir un producto con grado de fijación bajo y usarlo para fijar moños y recogidos.
El momento para aplicarla es cuando el peinado está pronto. De esta forma, el producto solo se adherirá al largo del cabello y se mantendrá alejado de las raíces.
No se recomienda el uso de laca para generar volumen en el cabello, puesto que para logar esto es necesario aplicar el producto desde el cuero cabelludo hacia los primeros centímetros de cabello, lo cual genera un daño directo en las raíces del pelo.
Si lo que buscas es un resultado permanente en lo que respecta al brillo y al volumen capilar, lo mejor que puedes hacer es sustituir los efectos efímeros de la laca por tratamientos que te aseguren resultados a largo plazo, tal como es el caso de las mascarillas capilares, por ejemplo.
El cuidado de tu cabello es una acción tanto externa como interna, por ende, una buena alimentación y una hidratación adecuadas también son claves para evitar la alopecia. Si tienes dudas acerca de la gravedad de tu caso, ponte en contacto con nosotros para que podamos evaluar tu caso y recomendarte el tratamiento más adecuado para ti.
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