El plasma capilar se obtiene a partir de la propia sangre del paciente, mediante un proceso que incluye el centrifugado de una muestra de sangre, de la cual se obtiene el plasma rico plaquetas. El plasma es la sangre sin células sanguíneas, es decir, es la porción líquida de la sangre sin coagular. Está compuesto por agua y proteínas plasmáticas como por ejemplo la albúmica, el fibrinógeno y las globulinas.
El uso de plasma capilar rico en plaquetas como método para luchar contra la alopecia y los problemas capilares es uno de los tratamientos más revolucionarios del momento y que más fama ha ganado en los últimos años. Sus resultados altamente exitosos, que provocan un importante crecimiento del cabello, respaldan su popularidad.
Aunque el tratamiento de plasma capilar es útil para frenar los diferentes tipos de alopecia o calvicie, es particularmente exitoso en los casos de alopecia femenina. Este tratamiento está recomendado tanto para los pacientes que sufren de problemas graves de calvicie, como para aquellos que empiezan a notar signos de caída o falta de cabello, a modo de prevención.
Al tratarse de la sangre del propio paciente, la compatibilidad para la correcta absorción de las sustancias es completa. El plasma rico en plaquetas contiene una serie de sustancias y proteínas que aceleran la recuperación de los tejidos dañados y ¿por qué no utilizarlo para la regeneración capilar?
